SACRAMENTO - Una variedad de electrodomésticos que no son regulados por emitir ozono, en sí emiten suficientes cantidades de este gas que pueden presentar un gran riesgo a la salud de los consumidores, así lo reveló una reciente investigación del Consejo de Recursos del Aire de California (CARB, siglas en inglés) titulada “Evaluation of Ozone Emissions and Exposures from Consumer Products and Home Appliances.”  La investigación que fue publicada hoy en el diario en línea  “Indoor Air”, resalta una brecha con respecto a la protección del consumidor.  

En la investigación de CARB se midieron las emisiones de ozono y los impactos causados por  este gas en interiores, los resultados fueron vinculados a 17 electrodomésticos que emiten ozono ya sea por manufactura o por su funcionamiento.  En las tres categorías analizadas, 5 aparatos emitieron ozono a niveles que pueden llegar a ser insalubres.  Los cinco aparatos incluyeron: uno de tratamiento de agua para lavado de ropa, dos lavadores de frutas y vegetales y dos limpiadores faciales a vapor.  Debido a su gran habilidad oxidante, el ozono es promocionado y comercializado como un desinfectante o eliminador de olores por los fabricantes.

Se estima que el uso de algunos aparatos contribuye hasta un 87 por ciento de la exposición diaria de ozono.  Una lavadora con sistema de tratamiento de ozono en el agua que fue evaluada durante un ciclo de lavado, incrementó las concentraciones de ozono dentro de un espacio o cuarto por 0.11 partes por millón (ppm), el cual es más alto que el estándar de salud de California basado en 1 hora de exposición de ozono al aire libre (0.09 ppm), e incrementó la concentración de la exposición personal por casi 0.42 ppm.  La concentración de la exposición personal es la concentración  a los que los usuarios del producto se exponen cuando están cerca del producto.  Este  nivel de exposición excede el nivel de la Etapa 2 de alerta de smog, la cual se activa cuando, en promedio, las concentraciones de ozono durante 1 hora alcanzan los 0.35 ppm.  En California, ese tipo de alerta no ha ocurrido desde 1988.

Para algunos aparatos, un solo uso no incrementa la concentración de ozono de manera notable dentro del espacio o cuarto, pero el uso prolongado puede resultar en una concentración elevada de exposición.  Por ejemplo, un lavador de frutas o vegetables incrementó la concentración de la exposición personal cuando fue utilizado durante tres ciclos de lavado consecutivos usando, agua reciclada, en un promedio de 2.55 ppm, o 28 veces más que el estándar de salud de California basado en 1 hora de exposición de ozono al aire libre (0.09 ppm).

Mientras que muchos electrodomésticos pueden emitir ozono, las emisiones de este gas solo han sido reguladas en los purificadores de aire.  Se ha hallado que los generadores de ozono – que presumen ser purificadores de aire y que producen ozono por manufactura y que son erróneamente comercializados con niveles “seguros” de oxígeno activado que remueven contaminantes del aire – y otros tipos de purificadores de aire, tales como los ionizadores y precipitadores electrostáticos,  incrementan la concentración del ozono dentro del hogar a niveles dañinos.  Como resultado,  CARB adoptó una regulación en 2007 que  limita a 50 ppb las emisiones de ozono en aparatos que limpian el aire en interiores. CARB ha certificado más de 1,600 modelos de purificadores de aire que cumplen con el estándard de emisiones de ozono.  Además, CARB ha identificado una lista de generadores de ozono que son potencialmente dañinos y que son vendidos como purificadores de aire.

La reciente investigación de CARB concluyó que se requieren más evaluaciones y ejecuciones, tales como alteraciones al diseño del electrodoméstico, desarrollo de estándares industriales y/o regulaciones que limitan las emisiones de ozono de otros tipos de aparatos.  Para más detalles sobre esta investigación, CARB ha desarrollado una página web que incluye una lista de productos parecidos a los que fueron analizados y que también emiten ozono.  La Comisión de Seguridad de Productos del Consumidor de los Estados Unidos (CPSC, siglas en inglés), es la agencia que posee autoridad para tratar con productos de consumo, y CARB ha entregado los resultados de este estudio a la CPSC.

El ozono a nivel de la superficie terrestre y, siendo un ingrediente clave del smog, es un contaminante dañino y causa efectos serios de salud e impactos ambientales incluyendo problemas respiratorios, hasta la muerte prematura en personas mayores y daño al cultivo.  Aparte de purificadores de aire, las emisiones de ozono no han sido medidas -ni reguladas – en estos aparatos o electrodomésticos.  El uso de algunos productos evaluados puede contribuir de manera significativa a una fracción de la exposición diaria de ozono.  Aunque se desconoce la cuota en el mercado, los aparatos pueden ser obtenidos fácilmente por su bajo precio y su amplia publicidad en-línea y en televisión.

Para una hoja de datos sobre los resultados de esta investigación, haz clic aquí.
Para video (b-roll), haz clic aquí.



   
Los tres principales emisores de ozono según la reciente investigación de CARB: sistema de tratamiento de agua para lavado de ropa (izquierda) y lavadores de frutas y vegetales.